El delicado el estado de salud del marido de Lydia Lozano: «No puede ni sacar al perro»
La colaboradora simultanea la evolución de su operación con los cuidados de Charly
Lydia Lozano, sobre cómo vivió el fin de 'Sálvame': «Llegué a pedir mi despido»

Son tiempos de demasiada agitación para Lydia Lozano justo cuando más calma necesitaba. Tras su conocida operación, de la que ahora se recupera, ahora tiene que lidiar también con los problemas de salud de su marido, conocido como Charly.
La colaboradora todavía se recupera de la fractura de vértebra que sufrió, pero ahora se conoce que su marido tampoco atraviesa por su mejor momento. Cuando se creía que Charly era quien se estaba encargando de las tareas cotidianas durante la convalecencia de su mujer, se sabe que es imposible que sea cierto.
Fuentes cercanas a Lydia Lozano han asegurado a 'Informalia' que su marido «ya no puede ni sacar al perro». A sus 72 años de edad no atravesaría un buen momento en lo que a su salud se refiere. De hecho, hace poco tuvo que ser operado a consecuencia de una dolencia que arrastraba desde hace tiempo: «Una dolencia aparatosa y dolorosa por la que también ha tenido que estar de reposo y ahora está con rehabilitación. Se les ha juntado todo», han revelado esas mismas fuentes.
Al marido de Lydia Lozano le tuvieron que operar hace años de una hernia discal, algo que dificultó notablemente su día a día. La recuperación fue lenta y sufrió muchos dolores, especialmente por la noche, pero la colaboradora de televisión siempre estuvo a su lado y gracias a su apoyo pudo mejorar.
Lo que no se le va a quitar nunca a Lydia Lozano es su buen humor, solo roto en ocasiones cuando algún compañero le ataca donde más duele y te toca la fibra sensible hasta llegar a la lágrima, faceta por la que también es conocida.
«Menos mal que Lydia tiene un carácter estupendo y nada le resta su optimismo y ganas de seguir adelante. De hecho, no ha dejado de trabajar prácticamente ningún día, salvo los obligados por su operación de espalda. Después, ha salido corriendo para seguir en los platós, porque a ella eso le da mucha vida», han manifestado al medio citado.
Una gran energía
De hecho, si por algo se conoce a la colaboradora de televisión es por su extremada y abrumadora energía. Eso es lo que le estaría dando fuerzas para recuperarse de su operación, atender a su marido y seguir con su profesión.
Tras su paso por 'Baila como puedas', Lydia se cayó y se lesionó una costilla. Aunque en un primer momento parecía ser algo sin mayor importancia, más tarde se convirtió en algo más serio que le llevó pasar por quirófano. «Ahora soy como Robocop. Tengo como una mochila con una barra de hierro detrás», contaba en 'Sálvame'. Por si fuera poco, también fue operada de cervicales y de un brazo. Un completo.
«Tengo un dolor lumbar por haber tenido la vértebra rota y no me averiguan qué me pasa (…) El lunes me hacen un TAC. No puedo más», confesaba a sus compañeros de tertulia sin saber que tenía el micrófono abierto. Unos minutos más tarde, abandonaba el plató y dejaba que sus compañeros revelaran a la audiencia cuáles eran los motivos por los que se iba.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete