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Israel prohíbe que el consulado español en Jerusalén preste servicio a los palestinos

La respuesta llega tras el reconocimiento de Palestina y los comentarios «antisemitas» de Yolanda Díaz

La embajadora de Israel acusa a Yolanda Díaz de utilizar «proclamas antisemitas» que fomentan «el odio y la violencia»

La ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda de Gobierno, Yolanda Díaz TANIA SIEIRA
Gerard Bono

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El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Israel Katz, ha anunciado la prohibición al consulado español en Jerusalén para que preste servicios a los palestinos en Cisjordania. La medida es una respuesta al reconocimiento del Estado palestino, anunciado por Pedro Sánchez el pasado martes, y a lo que Israel entiende como un «llamamiento antisemita» por parte de Yolanda Díaz, que reclamó una Palestina libre «desde el río hasta el mar» (referencia al río Jordan y el mar Mediterráneo, donde se ubica el Estado judío).

«He decidido cortar la conexión entre la representación de España en Israel y los palestinos, y prohibir que el consulado español en Jerusalén preste servicios a los palestinos de Cisjordania», afirma el comunicado de Katz en X (antiguo Twitter) y añade: «Si esta persona ignorante y llena de odio quiere entender lo que realmente busca el islam radical, debería estudiar los 700 años de dominio islámico en Al-Andalus, la España actual». No concreta si esta última frase va dirigida a Pedro Sánchez o Yolanda Díaz.

Tras el reconocimiento del Estado Palestino, que se hará efectivo el próximo martes en el Congreso, Israel llamó a consultas a su embajador en España —también a los de Irlanda y Noruega, al seguir ambos países los mismos pasos— y advertía: «Tendrá graves consecuencias». Hoy, la crisis diplomática que viven en España e Israel se agrava, con la decisión de limitar la actividad del consulado español en la capital israelita.

Las delegaciones consulares, a diferencia de las Embajadas, que sirven de nexo entre las autoridades políticas de ambos países, prestan servicios a los ciudadanos nacionales desplazados en el extranjero. Específicamente, el afectado por la restricción cubre no sólo Jerusalén, sino también la Franja de Gaza, donde se está desarrollando el grueso de la guerra con Hamás, y Cisjordania, territorio donde recae la prohibición.

Esta última zona es uno de los focos principales del conflicto político palestino-israelí. A grandes rasgos, está dividida en tres zonas. Una en la que la Autoridad Palestina tienen el dominio (A), otra en la que existe un control militar compartido (B) y una tercera (C) en la que este es exclusivo de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Además, organizaciones supranacionales, como Naciones Unidas, humanitarias y de representación de la causa palestina la han puesto en el centro del debate a cuenta de la actividad de los colonos israelíes.

En ese complejo contexto, el consulado español realiza labores de asistencia a los españoles que se encuentran en su jurisdicción. También de representación diplomática ante la Autoridad Palestina. Como explica su propia página web, tanto en lo tocante a documentación (pasaportes, libros de familia y otros) como en materia notarial (poderes, testamentaría), de registro civil (inscripción de matrimonios, nacimientos y defunciones) y de asistencia propiamente dicha (ayudas en determinados casos).

Se trata de uno de los «consulados históricos» de Jerusalén, una ciudad que es el nexo de las tres religiones monoteístas. Por eso mismo también se ocupa de la Obra Pía en Tierra Santa, institución pública dependiente de Exteriores que se encarga de preservar la presencia española en los lugares sagrados.

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