Hazte premium Hazte premium

Crimen de Samuel Luiz: 16 testigos apuntalan la «participación» de los cinco acusados

Vídeos y fotos confirman la «presencia y participación» en la «agresión grupal» de los cinco investigados, y de dos de ellos se halló ADN

El juicio por el asesinato en 2021 en La Coruña se prevé para antes de este verano

Uno de los detenidos por el crimen de Samuel Luiz, en La Coruña, en una imagen tomada el 5 de agosto de 2021 EFE
Jesús Hierro

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La madrugada del 3 de julio de 2021, una brutal paliza colectiva acabó con la vida de Samuel Luiz, un enfermero de 24 años que aquella noche había salido de fiesta por La Coruña con una amiga. Tres años después del crimen, cinco jóvenes se sentarán en el banquillo como coautores de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento, en un juicio, con tribunal popular, que no tiene fecha pero que se prevé antes del verano. De todos los encausados «hay grabaciones y anexos fotográficos donde se observa su presencia y participación en la agresión grupal», certifica el juez en el auto en el que decreta abrir juicio oral. Pero en el mismo escrito, al que ha tenido acceso ABC, el instructor también enumera e identifica a un total de 16 testigos que confirman la «participación en los hechos» de los investigados.

A continuación, el relato de los hechos presuntamente cometidos por los cinco encausados, y que, según el juez, «justifican la apertura de juicio». Sucedieron a las puertas del pub Andén, en el entorno del paseo marítimo de La Coruña; un local al que tanto los agresores como la víctima, a quien los presuntos asesinos no conocían, habían ido aquella noche. Todo partió de un malentendido. Al filo de las tres de la madrugada, en la bancada de acceso al paseo marítimo, Samuel hablaba por videollamada con un amiga que se había quedado en casa. El acusado Diego M. pensó que Samuel le estaba grabando con el móvil a él y a su novia, Katy S., y le amenazó: «Deja de grabar, a ver si te voy a matar, maricón». Se abalanzó sobre la víctima, dándole golpes y patadas en la cabeza. Las acusaciones, y así lo recoge el juez, creen que el atacante sabía que esa agresión podía matar a Samuel. Y también que Diego M. interpretó, por su apariencia, que Samuel era homosexual, y por eso exhibió su «animadversión» hacia su condición sexual.

Los hechos continuaron así. A Diego M. pronto se le unió su amigo Alejandro F., alias 'Llumba', que tiró a Samuel al suelo tras rodearle el cuello con el abrazo, con una técnica conocida como 'mataleón'. Al mismo tiempo, la novia de Diego M. trataba de impedir que la amiga de Samuel pudiese socorrerle: la tiró al suelo, gritándole que «se largara», porque allí «no pintaba nada». Las acusaciones creen, además, que Katy S. compartía con su novio «la animadversión» hacia Samuel por su condición sexual. Este punto es importante, porque es la razón de que las acusaciones pidan añadir en sus condenas el agravante de discriminación por orientación sexual.

Más agresores se unieron a la paliza a una víctima a la que dejaron sin escapatoria. Se sumaron los acusados Kaio S. y Alejandro R., pero también otros dos jóvenes, que eran menores de edad en el momento de los hechos, y que ya fueron condenados por asesinato en un proceso al margen. Todos ellos golpearon «sistemáticamente, de manera sorpresiva y brutal» a Samuel, que se vio «rodeado y golpeado, inerme, a merced de sus grupo de agresores» y «sin posibilidad de defenderse». En un momento dado, Samuel, auxiliado por dos jóvenes senegaleses que pasaban por allí, consiguió ponerse de pie. Pero los agresores no dejaron de pegar a Samuel y también persiguieron a los senegales, que tuvieron que escapar. Los atacantes se fueron, dejando desplomado a Samuel, que murió tres horas después en el hospital. Unos testigos oyeron a Katy S. decir a su novio que «quien le manda al puto maricón meterse en eso, si era un puto maricón». Otro indicio para el agravante de discriminación sexual.

Indicios individualizados

Este es el relato que, en base a los escritos de las acusaciones, reproduce el auto de apertura de juicio, que se dictó hace dos meses pero del que ahora conocemos más detalles. Lo más destacado, los indicios que pesan sobre cada uno. De todos, «se dispone de grabaciones y anexos fotográficos donde se observa su presencia y participación en la agresión grupal». Pero el juez individualiza los indicios de todos, uno por uno. Hay un total de 16 testigos que confirman la «participación en los hechos» de cada uno: 11 identifican a Diego M., para quien la fiscal pide 25 años de cárcel; cuatro identifican a Kaio S., que se enfrenta a 27 años de prisión; también cuatro identifican a 'Lluma', para quien piden 22 años; tres testigos identifican a Katy S., que se enfrenta a 25 años de cárcel, y un testigo identifica a Alejandro M., para quien se pide 22 años de cárcel.

En total, 16 testigos, pero varios de ellos identificaron a más de un investigado. Además, en el caso de Diego M., certifica el juez, la Policía encontró su ADN «en la cara de la víctima». También hallaron ADN de 'Lluma', pero en el caso de este, «en cristales al lado de la víctima». Ellos dos y Kaio S., para el que se pide la pena mayor por robar el móvil de Samuel, están en prisión preventiva. Katy S. y Alejandro M. esperan el juicio en libertad provisional.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación