Ni santa ni justa
Se necesitan fuertes
El que a estas alturas no sablea al yonqui de la experiencia es porque no quiere
Con los males no debería uno obsesionarse demasiado, pero cuando han ocurrido y se han observado, cuando ya es capaz el ojo de identificar las señales que anuncian la catástrofe porque el patrón se ha desenrollado y plegado frente a él, no es planteamiento de ...
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