puntadas sin hilo
La carta de Hillary
En estos tiempos de inmediatez y exhibicionismo enviar una misiva supone apostatar de la modernidad
Esta señora me ha ganado. Y mira que me caía gorda. Veía a Hillary Clinton como una Rottenmeier del progresismo más rancio, además de la típica empollona sabihonda predestinada a triunfar. Se le atribuyó el éxito político de su marido, a quien la historia recordará ...
Artículo solo para suscriptores
Si ya estás suscrito, inicia sesión
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete