Opinión
Contra las Cuerdas de El Siglo del 14 de enero del 2018
Ya el excampeón del patio cumplió siete meses haciendo sombras detrás de los barrotes, debe estar apolismado por el estrés del encierro y no las debe tener todas consigo. Lo que parecía imposible ocurrió, el Locario está abajo en las tarjetas en el pleito por su libertad.
Ahora está a la espera de la fecha en la que será traído a la fuerza a nuestra tierrita donde está programado en varias veladas, una de ellas es llamada ‘Pinchazos'
Su cuadra se ha debilitado en los últimos años y no se ve por donde vuelvan a tener protagonismo. Los que eran sus pupilos andan al garate y con ganas de llegar a la cima del box panameño, algunos de ellos incluso lo han sonado en el mentón, para distanciarse.
No se ve por donde el Locario pueda capear el temporal, todo lo contrario, lo que le viene es una lluvia de golpes, que sino está en condiciones lo mandarán a la lona en las primeras de cambio.
Veremos como queda en pleito interno del disco rayado. Si gana el yeyé será el final del Locario, pero si voltea la tortilla tomará un segundo aire.
Otro de los combates que tienen a la afición a la expectativa es el de las ratificaciones. El rol de los enzapatillados será fundamental para el resultado.