1000
millones de dólares en impuestos es la cifra que estiman para 2020.
Internacional
El mandatario estadounidense buscará la forma de frenar la legalización.
Cuando el reloj marcó las doce, muchos californianos cambiaron el tradicional beso navideño por un porro
DROGA
En un momento en que los estados avanzan a velocidad de crucero hacia la legalización de la marihuana en EE.UU.., la Casa Blanca no sólo ha echado el freno, sino que trata de dar marcha atrás ante el desconcierto de gobiernos locales y empresas que ven en este negocio una suculenta fuente de ingresos.
El año 2018 no podía comenzar de mejor manera para los fumadores de marihuana en uno de los estados más liberales del país: California.
Cuando el reloj marcó las doce, numerosos ciudadanos dejaron de lado el tradicional beso de medianoche para llevarse un porro a los labios y encenderlo de forma ceremoniosa.
La legalización del uso de la marihuana para usos recreativos acababa de llegar a California y con ella nacía un negocio que se estima que, para 2020, podría suponer ingresos en torno a los 7.200 millones de dólares en ventas y 1.000 millones de dólares en impuestos.
Las televisiones mostraban imágenes de autobuses convertidos en auténticos fumaderos.
‘La mayoría de los estadounidenses apoyan legalizar el consumo de la marihuana para los adultos, y los legisladores locales se están dando cuenta de que es el momento de adoptar políticas sensatas al respecto', explicó el portavoz del Proyecto Político de la Marihuana, Morgan Fox.
En efecto, todo el mundo en California parecía celebrar la medida, sin embargo, en ese mismo momento, en Washington DC, el presidente Donald Trump debía estar sopesando cómo parar una tendencia que ha llevado a legalizar la marihuana en ocho estados.
1000
millones de dólares en impuestos es la cifra que estiman para 2020.